Cuando viene algún niño a casa, es difícil que no coma lo que solemos tener preparado, pero en alguna ocasión si se da la coincidencia que lo que ponemos no le gusta, le hacemos algo rápido para que no se quede sin comer.

Es lo que pasó este verano con nuestro sobrino Pablo, tiene 10 años y le gusta comer de todo, pero esa noche no le entraba por el ojo la cena que habíamos preparado, un salteado de calabacín con tomates Cherry y una ensalada de arroz vegetariana.

No hubo problema en preparar en un periquete unos huevos fritos de nuestras gallinas felices, tienen un sabor increíble, son supersanos y cien por cien ecológicos, pues están criadas al aire libre y tan solo comen maíz y verduras de nuestro huerto. Para acompañarlos lo pudimos convencer para que probara las verduras, que por cierto le gustaron, y unas chips caseras realizadas con la maquinita para cortar verduras que os enseñé hace unos días.

Pablo quedó completamente satisfecho y esto es lo que nos dijo después de comérselo todo:
- “Por fin he sabido lo que es comerse unos huevos fritos como Dios manda”.

HUEVOS FRITOS PARA PABLO

INGREDIENTES

• 2 huevos de gallinas criadas al aire libre 
• 1 patata nueva
• un poco de salteado de calabacín con tomatitos cherry
• Aceite de oliva virgen extra.
• Sal.

ELABORACIÓN

• En una sartén pequeña poner un poco de aceite a calentar, freír los huevos y sacarlos a un plato, espolvorear unos granos de sal por encima, servir acompañado de unas patatas chips y un poco de calabacín salteado con tomatitos cherry.