Bonito del Norte con Tomate Concassé

En mi afán por fotografiar todo lo que cocino y me parece interesante enseñároslo, capturé unas instantáneas de este plato, sencillo y delicioso como sólo puede ser algo que entre sus ingredientes cuenta con productos de calidad. Lo cociné en cuanto llegué a casa, un día que fui al mercado por la mañana con la intención de comprar pescado fresco para el fin de semana, como se puede apreciar en la imagen de abajo, las rodajas de bonito estaban diciendo «¡Cómeme!», así que servido junto a un delicioso y fresquito tazón de Gazpacho de Papaya de primero, que dejé preparado antes de salir a la compra, me solucionó el almuerzo en un instante; no me gusta congelar pescado fresco cuando puedo comprarlo a diario, sobre todo porque, por muy bien que quiera guardarlo, siempre acaba con un sabor extraño, y con una textura, que desmerece la calidad de la mejor materia prima, eso no quiere decir que no compre pescado congelado de vez en cuando, porque los hay ultracongelado de primera calidad, pero habiendo opciones frescas a buen precio, las prefiero.

Por otro lado, este verano, a pesar del calor, o precisamente por eso, ha sido una buena temporada de pescado fresco en los mercados de la zona donde vivo, consiguiendo a buen precio algunos de los que más me gustan, sobre todo variedades de pescado azul que a no ser que las compre en conserva, ya listas para comer, nunca las consumo congeladas, porque no me gusta su sabor, así que como es natural, he dado un buen tute a todo lo que me entra por el ojo. Especialmente a la melva, que ha sido la protagonista durante este par de meses en mi cocina, sentía tener una 'deuda' pendiente con el pescado azul, y para saldarla he llenado mi portafolio de recetas deliciosas, como la que os mostré encebollada en una salsa de Oporto que queda espectacular, poco antes, compartí cómo prepararla en escabeche, otra manera ideal presentada como aperitivo, entrante o en ensaladas, y que he repetido en escabeche rojo, de momento no voy a publicarlo porque está hecho del mismo modo, con la única diferencia que lleva añadido un poquito de Pimentón de La Vera, con un resultado, en sabor y color, muy similar a los clásicos mejillones en escabeche de conserva, y que por cierto, con lo que me gustan, nunca los he hecho en casa, tendré que ponerlos en práctica más pronto que tarde; también, a principios de temporada, compartí otro plato de melva cocinada en una salsa clásica a la andaluza que os recomiendo probar, porque es de ese tipo de salsas que casan bien con todo tipo de pescados, así que ya veis lo versátil que puede ser.

Otro de los pescados que ha estado presente en mi cocina este verano, ha sido el Bonito del Norte, un pescado que no necesita presentación, y que junto al Atún, es el rey de los pescados azules, y aunque en el caso del bonito, en su mayoría se pesca para destinarlo a la fabricación de conservas, también es perfecto para platos típicos de la cocina mediterránea, como los tradicionales guisos con patatas en amarillo de la cocina andaluza, que se hacen con todo, cocinadas con choco, con azafrán y bacalao o con huevo cuajado quedan de escándalo, lo digo por mencionar alguno más de mis platos, como mi Ragoût de Merluza y Guisantes o mi Marmita de Bacalao, inspirados en clásicos que además de saludables y reconfortantes, son el tipo de platos que más gustan a la hora de comer sin abandonar las buenas costumbres de la cocina casera. Pero si lo vuestro son los platos fríos, porque aún apetecen, recomiendo probar mi Atún encebollado os aseguro que está para chuparse los dedos.

Podría haber elegido una receta más elaborada, conozco algunas muy buenas, pero hoy os muestro cómo prepararlo en un santiamén con una sencilla salsa de tomate concassé, cuando algo no necesita añadidos para ser perfecto, no debemos complicarnos en la cocina para disfrutarlo, aunque como cuadratura del círculo, sugeriría acompañarlo de un buen trozo de pan para rebañar el plato como merece, no os privéis y daros el gusto, y como un día es un día, también sería buena idea, tomar una copa de vino blanco bien frío, ¡Pa'perder el sentío! Si os gusta, claro está, o en su defecto, un buen vaso de agua fresquita, si no tenéis costumbre de beber vino, posiblemente muchos seréis como yo, que solo bebo vino de higos a brevas o cuando se tercia, de ciento en viento, porque me da dolor de cabeza, a menos que sea del caro, que entonces no hay dolores que valga, parece mentira que tenga que contarlo todo ¡ja, ja, ja…! Sea como sea, el caso es quedar satisfechos y contentos, pero sin excesos. Comenzamos.

Bonito del norte en rodajas

INGREDIENTES

• 1 Rodaja de Bonito de Norte, fresco, por comensal.
• Sal
• Aceite de Oliva Virgen Extra
• Eneldo

Para la Salsa de Tomate Concassé

• 3 o 4 Tomates maduros
• 1 Cebolla
• 1 Zanahoria pequeña
• 1 Pimiento Verde Italiano
• Aceite de Oliva Virgen Extra 
• Sal

Bonito del norte en supremas

ELABORACIÓN

1. Quitar la piel y la espina central a las rodajas de bonito. Trocear en supremas.
2. Sazonar las supremas de Bonito, por ambos lados.
3. Marcar a la plancha, muy caliente, con unas gotas de aceite de oliva virgen extra, hasta dorar los trozos por ambos lados, deberán quedar jugosos, pero mejor poco hechos que pasados de cocción para que no resulten resecos.

De la Salsa de Tomate Concassé

1. Picar en brunoise la cebolla, la zanahoria y el pimiento. 
2. Sofreír en un poco de aceite de oliva virgen extra, la cebolla, junto con la zanahoria y el pimiento. 
3. Añadir el tomate pelado, quitando las semillas, y troceado en cubos de 5 mm. aproximadamente. Cocinar hasta reducir. 
4. Rectificar la acidez con una pizca de azúcar, si fuera necesario.
5. Sazonar al gusto.

Del emplatado y presentación

1. Servir las supremas de Bonito, dispuestas unas sobre otras.
2. Napar con un poco de salsa, sin cubrirlas del todo. 
3. Espolvorear un poco de eneldo por encima.
4. Servir acompañado del resto de la salsa en salsera aparte.

Podéis ver cómo lucía mi mesa en este Reels

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