Bocadillo de Pulled Chicken con Chutney de Mango

Aunque cualquier época del año, es buena para preparar bocadillos, es justo ahora, en verano, apretando el calorcito, cuando más apetecen, sobre todo porque es una manera fácil de comer bien, sin complicarse en la cocina, bueno, eso dependiendo del relleno que queramos poner dentro del pan. Yo suelo ir a lo sencillo, y más cómodo para mi, para qué nos vamos a engañar.

Comer un bocadillo puede ser algo sin más, o convertirse en toda una experiencia Gourmet, si sabemos como combinar ingredientes, y sin que para ello sea necesario pasar horas en la cocina, ni tan siquiera que tengamos que hacer un desembolso económico considerable, como creo ha quedado demostrado en todas mis propuestas, a lo largo de los años.

Esta es la tercera que os muestro, de los cuatro bocadillos elaborados con la pieza de Pulled Chicken, que compré en el supermercado alemán al que pareciera que estoy suscrita, y si bien podríamos cocinarlo en casa, tan solo tendríamos que disponer de tiempo, pues es una carne que se cocina a fuego lento, mejor si lo hacemos en olla de cocción lenta, que en mi caso no tengo, pero sé, por una de mis niñas que no se cansa de repetirme las ventajas que tiene cocinarlo en ella, que facilita el trabajo, y la diferencia es notable, pero yo tiré por la vía fácil, comprándolo ya cocinado, y mereció la pena, porque estaba riquísimo, y en todos los bocadillos que hice, quedó perfecto, quizás y si me animo a hacerlo en casa, os lo enseñe algún día, pero de momento, creo que teniendo estas alternativas, que encontramos en el supermercado, no está nada mal recurrir a ellas.

Sin embargo, no hice lo mismo con el Chutney de Mango, pues aquí si que “me compliqué”, por decirlo de algún modo pues tampoco fue para tanto, teniendo como tenía, un tarro de chutney de mango en mi despensa, que encontré en una tienda de delicatessen, no eché mano de él, y decidí prepararlo yo misma con un hermoso mango fresco que acababa de comprar, quería tener uno publicado, pues a pesar de lo sencillo que es cocinarlo, hasta hoy no encontrábamos ninguno entre las Salsas que tengo publicadas en DBM, y ya iba siendo hora de hacer algo diferente, y de paso también esto pasaría a ser realmente una receta.

Para su elaboración, no he necesitado muchos ingredientes, aunque si he respetado el toque picante que caracteriza a los chutneys, pero en esta ocasión, en lugar de añadir jengibre fresco, que también le hubiera sentado perfectamente, hice uso de una Guindilla Encurtida, de las que preparé en mayo del año pasado, y que cuanto más las uso, más las adoro. Están riquísimas, y puedo asegurar, que no solo aporta un toque picante a la salsa, sino un ligero aroma a especias, cálido que lo hace irresistible, bueno, qué os voy a decir, si entre mis desmesuras, hago gala de cuanto me gusta el toque canalla con generosidad, ¡Ja, ja, ja...! Y para los que decís, que no os gusta el picante, primero os recomendaría probarlo, no se nota casi nada, pero aporta la nota diferente, que lo hace ser excepcional, pero si aún así no os atrevéis, lo podéis quitar, y seguro estará bien rico, aunque quizás os recuerde, si no lleva picante, más a una mermelada o compota, pero el aroma del aceto lo hará diferente.

Por otro lado, y para no repetirme en el acompañamiento del bocadillo, con las clásicas Patatas Fritas, que por muy caseras que sean, no dejan de ser patatas fritas, eché mano de medio calabacín que tenía reservado para cocinar un plato de pasta, al verlo se me encendió la bombilla, imaginándolo rebozado en una fina y crujiente capa de tempura, y así lo hice, que tampoco es que sea muy ligero porque tiene sus calorías, pero que una vez puestos a pecar, tampoco pasa nada, si lo hacemos con mesura, la verdad que para nosotros fue un almuerzo perfecto, aunque evidentemente, eso será cuestión de prioridades, pudiendo prepararlo en cualquier momento del día, incluso para una cena, mientras vemos un partido de fútbol, al que le guste, ahora que estamos en plena UEFA EURO 2024, por cierto yo, que no entiendo nada, en casa de mi padre veo partidos al ritmo del más futbolero, cantando goles como si en ello me fuera la vida y hasta gustito le estoy tomando, ¡ja, ja, ja…! Aunque preferiría disfrutarlo viendo una película, o mejor aún, desconectados, sentados al fresco del patio, terraza o jardín, incluso en la azotea mirando las estrellas, en cualquier caso el plan que elijamos, siempre que lo hagamos por voluntad propia, solos o en buena compañía, será el plan perfecto.

Comenzamos.

INGREDIENTES

• 1 Panecillo Brioche
• 125 gr de Pulled Chicken
• Unas hojas de Canónigos
• 2 c/s de Queso Ricotta
• 2 c/s de Chutney de Mango

Panecillo Brioche

Para el Chutney de Mango

• ½ Mango maduro
• ¼ de Cebolla pequeña
• 25 gr de Mantequilla
• ½ Guindilla Encurtida
• 1 c/s de Aceto Balsámico
• ¼ c/c de Curry en polvo
• ½ c/c de Azúcar
• 1 pizca de Sal Rosa del Himalaya

Chutney de Mango

Para el Calabacín en Tempura

• ½ Calabacín Verde
• 2 c/s de Harina de repostería
• ½ c/c de Cúrcuma o Azafrán en polvo
• 1 c/p de Orégano
• ½ vasito de Agua
• ½ vasito de Cerveza
• Una pizca de bicarbonato sódico.
• Sal
• c/n de Aceite de Oliva Virgen Extra, para freír.

Pavías de Calabacín

ELABORACIÓN

Del Chutney de Mango

1. Cortar la cebolla en juliana fina.
2. Poner en un cazo la mantequilla. Añadir la cebolla. Sofreír.
3. Cuando la cebolla esté tierna, añadir la guindilla troceada.
4. Pelar y cortar el mango en brunoise. Añadirlo al sofrito.
5. Añadir el curry y el azúcar. Remover.
6. Verter el aceto balsámico. Mezclar y cocinar unos minutos, hasta que el mango se ablande ligeramente. Reservar.

• Se puede servir tal cual, o triturado al gusto, en función de la textura deseada.

Del Calabacín en Tempura

1. Cortar el calabacín, con piel, en bastones de cinco centímetros, por uno de grosor.
2. Espolvorear con sal y orégano.
3. En un bol, mezclar la harina con la cúrcuma o el azafrán, una pizca de bicarbonato y otra de sal.
4. Verter un poco de agua, y cerveza.
5. Mezclar con un tenedor, para deshacer los posibles grumos.
6. Ligar, añadiendo un poco más de líquido, hasta conseguir una pasta untuosa, fina y ligera.
7. Pasar las tiras por la mezcla, para que queden completamente cubiertas.
8. Calentar el aceite. Freír por tandas, hasta que adquieran un bonito color dorado.
9. Escurrir sobre papel de cocina. Reservar.

Montaje y Presentación del Bocadillo

1. Calentar el pulled chicken en un cazo.
2. Sobre la base del panecillo, disponer un bouquet de canónigos.
3. Cubrir con el pulled chicken.
4. Cubrir con el queso Ricotta.
5. Añadir el chutney de mango.
6. Cubrir con la tapa del panecillo.
7. Servir acompañado del calabacín en tempura, presentado aparte en un cartucho de papel, con una bebida bien fría al gusto, en mi caso, un vaso de agua y una cerveza de malta tostada 0/0.