Tortilla de Queso 'Shropshire Blue'

No sé si hoy realmente la tortilla de queso que os presento es la protagonista de este post, o el queso, yo diría que más bien es el queso, un buen trozo de 'Shropshire Blue' que una de mis niñas me regaló hace unas semanas. Sabiendo cómo nos gusta el queso, no podría habernos hecho mejor regalo, no lo conocíamos y me ha resultado realmente delicioso, un queso de importación, que podría encontrar en tiendas Gourmet o en páginas de venta 'On line' que nos ayudan a poder disfrutar acercándonos a casa todo aquello que nos gusta, a golpe de clic y pase de visa.

El Shropshire Blue es un queso azul británico. Su origen es relativamente actual, elaborado por primera vez, en los años '70 del pasado siglo, en Escocia por un fabricante experto en la preparación del 'Blue Stilton' en Nottinghamshire. Fue conocido inicialmente como 'Inverness-shire Blue' o 'Blue Stuart', pero finalmente se comercializó como 'Shropshire Blue', nombre elegido para aumentar su popularidad, a pesar de carecer de relación alguna con el condado de Shropshire. Después del cierre de la empresa láctea productora, en 1980, la elaboración de este delicioso queso fue recuperada en Cheshire, pero de nuevo dejó de producirse. Actualmente es fabricado, con buena demanda, en los condados de Leicestershire, Nottinghamshire, Shropshire y Newport. 

Queso 'Shropshire Blue'

Posee una corteza natural de color grisáceo, madura durante unas 10–12 semanas, con un contenido graso del 34%. Hecho de forma parecida al 'Blue Stilton', es un queso suavemente ácido, con un sabor característico ligeramente picante, más fuerte y cremoso que el Stilton. Elaborado con leche de vaca, debe su color naranja oscuro al aporte de achiote, un colorante natural, posee las vetas azul verdosas características de este tipo de quesos, debido a la aparición, durante el proceso de fermentación y maduración, de un hongo comestible, el Penicillium Roqueforti. Resulta espectacular en una tabla de quesos, con uvas, frutos secos, tomatitos de colores y encurtidos, aunque también es excelente comerlo solo a trocitos, acompañado de una copa de Palo Cortado o un Oporto lo elevaremos al Olimpo de los Dioses. En cocina lo utilizaremos con moderación, por su sabor invasivo, evidentemente eso va en gustos, es ideal con patatas asadas, en un delicioso 'Cordón Bleu' de pollo o como en el caso de hoy, en una exquisita Tortilla Perfecta.

Hacía tiempo que deseaba incluir una Tortilla de Queso en mi recetario, la conozco desde que en los '80 una de mis hermanas estuvo estudiando en Londres, y a su regreso trajo la maleta llena de chocolates 'Cadbury', 'Maltesers', 'After Eight', latas de té 'Earl Grey' con su delicioso aroma a bergamota, y alguna que otra receta, anotada en un cuaderno 'Moleskine', sencilla, porque ella no era, ni es, muy cocinillas, pero para nosotras, las pequeñas de la casa, todo nos resultaba fascinante, unos Scones con mantequilla y mermelada o unos simples huevos revueltos con bacon y pan de semillas de amapola, fueron todo un descubrimiento delicioso, pues semejantes ricuras no formaban parte de nuestros desayunos por aquel entonces. Pero lo que realmente más me gustó, de todas las nuevas costumbres 'British Style' que nos trajo, fue la tortilla de queso, y que en casa adoptamos sin pudor alguno, y más siendo yo desde chica, ratoncilla empedernida y fan total de cualquier tipo de tortilla.

Mi madre no solo copió la receta en su PDA, sino que la mejoró, ya que mi hermana cocinar, cocinaba regular, ¡ja, ja, ja...! Y desde entonces hasta hoy, la Tortilla de Queso, es parte de nuestras vidas, es un recurso, siempre que no tengo ganas de cocinar, pero me apetece comer algo calentito. Como parte de una cena ligera, o dentro de un panecillo en forma de bocadillo o tierno y jugoso sándwich, hará el momento del día más delicioso que te puedas imaginar, y con solo tres ingredientes, huevos, queso y aceite de oliva. Aunque la receta recomendaba cocinarla con mantequilla, mi madre fue incondicional, negándose a sustituir nuestro apreciado oro líquido, un extraordinario Aceite de Oliva Virgen Extra andaluz, que no le hizo nada mal, al contrario, queda igualmente riquísima. Así mismo, el queso que utilizaba era tipo cremoso, en porciones o en lonchas, pero con los años fuimos descubriendo otros sabores, y ahora la realizo con cualquier queso que me apetezca, de hecho con Roquefort o azul danés, más asequible, la hago con frecuencia, incluso con Cabrales o Valdeón, dependiendo del momento y el queso que tenga en casa, de ahí que en cuanto cayó este trozo de queso en mis manos, solo pude pensar en hacerme una Tortilla Perfecta para nuestro Club, y aquí está. Comenzamos.

INGREDIENTES

• 2 Huevos de Gallinas Felices (por comensal)
• 40 gr de Queso Shropshire Blue (por tortilla)
• Aceite de Oliva Virgen Extra
• Sal Rosa del Himalaya
• Pimienta de Jamaica
• c/n de Patatas (para freír)
• c/n de Rábanos rojos 

ELABORACIÓN

1. Cascar los huevos en un bol. Batir.
2. Añadir una pizca de sal y pimienta de Jamaica, recién molida si se desea.
3. Desmenuzar el queso y añadirlo al huevo batido.
4. Calentar  a fuego fuerte una sartén y añadir un poco de aceite.
5. Verter los huevos batidos con el queso, y ligar un poco, antes de cuajar ligeramente.
6. Reducir el fuego y plegar la tortilla sobre sí misma, dando la forma deseada.
7. Pelar y cortar las patatas en cerilla, freír en abundante aceite de oliva, bien caliente. Escurrir una vez fritas y doradas.
8. Presentar la tortilla con las patatas fritas, ligeramente sazonadas, y unas rodajas de rábano, al gusto. 

Como era de esperar, he cocinado esta tortilla, además de para darme el gusto en la mesa, expresamente para enriquecer el amplísimo surtido con el que podemos gozar hasta el infinito y más allá, no solo con la vista, sino cocinando y comiendo, en #lacoleccciónmásricadelmundo, casi 350 Tortillas Perfectas ¡Disfrutadlas!

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