Tarta de Turrón | Dos Versiones

Las tartas de turrón, porque son dos, que os enseño hoy, están elaboradas de manera similar, cambiando algunos ingredientes, como la variedad de turrón, que por cierto no son restos de Navidad, están comprados a propósito, en la Av. de La Constitución, de Sevilla, hay una tienda de una conocida marca que los vende todo el año, por lo visto hay bastante demanda entre la clientela que busca variedades diferentes, con éxito, y como en casa nos encanta probarlo todo, nunca falta alguna que otra tableta, ya sea de las novedades, como de los clásicos.

Hace tiempo que quería repetir mi Cheesecake de Turrón, aunque la he preparado en muchas ocasiones, nunca saco fotografías nuevas para reeditar la entrada, cuando la publiqué hace años, con fotos no demasiado buenas, no estaba muy puesta yo en esas cosas y no las veía tan mal, pero poco a poco he ido afinando mi ojo bloguero, y deseando renovarlas  nunca encuentro el momento, en esta ocasión tampoco me ha sido posible realizar mi sesión fotográfica, pero aprovechando que hice algunas instantáneas, para compartir en el WhatsApp de familia, he querido compartirlas porque sin ser muy artísticas, al menos muestran que este tipo de tartas son una buena opción para los que como yo, vayáis a lo sencillo y seguro, con resultados realmente aceptables.

Básicamente es la misma Cheesecake que tengo publicada, pero he querido escribir un nuevo Post, al haber realizado unos cuantos cambios, que la hacen más ligera, me ha gustado mucho el resultado y creo que es interesante tenerlo en cuenta, veréis que la decoración es muy sencilla, porque están preparadas de manera improvisada, y aunque parezca que hacer dulces no es lo mío, no es así, bueno tampoco creáis que me quiero poner medallas, sin pretensiones sé hasta donde llegan mis limitaciones, también es cierto que en este espacio no me prodigo mucho en repostería y después de 11 años, solo comparto Lo más dulce que hago en casa, en su mayoría, dulces tradicionales, bizcochos, y algunos postres sencillos, que según mi gente me sale todo riquísimo, pero es que no doy abasto y cuantas más cosas hago, más me quedan por hacer, para al final recurrir a mi tabla de salvación a la hora de poner un dulce en nuestra mesa, mi primo, en alguna ocasión os he contado que es pastelero y con su confitería, nos endulza la vida a toda la familia, pero cuando me da el siroco en mis momentos dulciarius, son este tipo de postres y tartas de andar por casa, los que hago para satisfacer la gula a los golosos de la familia, que no por ser pocos, entre unos y otros, no dejamos ni las migas.

Ambas tartas fueron el postre de dos almuerzos servidos con una semana de diferencia, el primero fue hace dos domingos, cuando celebrábamos el precumpleaños de mi padre, también hubo bizcocho para la merienda, además de los pasteles de mi primo que nos los merendamos para la fecha señalada, los que me seguís en IG, lo visteis porque durante varios días estuve compartiendo Reels con fragmentos de todo lo que hubo en nuestra mesa, la segunda tarta, la hice justo al domingo siguiente, ya pasado el cumpleaños, como colofón a una semana intensa, entre paquetes sorpresas, almuerzos y meriendas-cenas, el mismo día del cumpleaños, que cayó en medio de la semana, para concluir una celebración que ha durado más que la coronación del rey de Inglaterra, ¡ja, ja, ja…! En casa no somos fastuosos, ni dados a nada que pueda parecer excesivo, pero este año la ocasión lo merecía, 93 años, que son los cumplidos por mi padre, no se cumplen todos los años, y aunque se hizo sin premeditación, todo lo acontecido resultó perfecto, dejándonos con el corazón contento y ganas de volverlo a repetir.

Cargado de momentos emocionantes, el más intenso y bonito, fue la recogida de un “paquete” llegado de Barcelona, en exclusiva para mi padre. El día del cumpleaños, mi cuñado Adrián, nos avisaba por WhatsApp que estuviéramos atentos, porque sobre el mediodía llegaría de manera urgente un envío que nos hacían mi hermana Pilar y él, nadie se percató de lo que se cocía, excepto mi Pepita, que es más larga que Juanita, la de Juan Valera y de inmediato nos escribió por privado, a mi Carmen y a mi, que sospechaba qué contenía el supuesto paquete, pensaba que venía mi Pilar, le dije que era imposible, el trabajo y su agenda lo imposibilitaban, además estuvimos hablando unos días antes, y lamentándolo mucho, me dijo que por muchas ganas que tuviera no podía hacer un hueco, pero mi Pepita tuvo la corazonada, y no se equivocó. El único que lo sabía era “El Niño”, que fue quien lo orquestó todo, "confabulado" con ellos, y por más que insistimos cuando le preguntamos no soltó prenda, ni siquiera notamos el nerviosismo, que tenía en el cuerpo desde esa misma mañana, saliendo de casa, sin decir ni pío, para ir a recogerla a la estación de Sta. Justa.

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Sobre las tres, más o menos, un poco tarde para lo que tenemos por costumbre, estaba terminando de poner la mesa, para almorzar, mientras esperábamos que regresara “El Niño” de una “reunión de última hora”, fue la excusa que se le ocurrió para no levantar sospecha, aunque yo ya estaba con la mosca detrás de la oreja, por culpa de la perspicacia de mi Pepita, cuando de repente, suena el timbre, y quien llamaba con insistencia no era precisamente #elrepartidordeamazon, sino “el niño” con el paquete sorpresa. ¡Y qué maravilla! ¡Ayomá! ¡Qué alegría más grande nos llevamos! No quería, pero casi me echo a llorar al ver la carita de emoción que puso mi padre, llevándose tan grata sorpresa al comprobar que el paquete, no era tal paquete, sino su Pilar bajándose del coche, como si volviera a casa por Navidad, fue un momento precioso, cargado de sentimientos, que hizo a mi padre, la persona más dichosa del mundo, no esperaba que su niña viniera por lo menos hasta el verano, y la felicidad de tenerla unos días en casa, ha sido el mejor de los regalos.

Comenzamos.

INGREDIENTES

• PARA LA TARTA DE TURRÓN CON ALMENDRAS DE CHOCOLATE

• 1 Tableta de Turrón de Yema Tostada, sin azúcares añadidos
• 500 ml de Leche Semidesnatada
• 500 ml de Nata para cocinar
• 2 sobres de Cuajada
• 2 c/s de Azúcar de Abedul
• 200 gr de Galletas María
• 50 gr de Mantequilla
• 1 Molde redondo de aro desmontable
• 1 hoja de Papel Sulfurizado

Para la decoración

• 150 gr de Mermelada de Arándanos 
• 25 Almendras de Chocolate
• 30 gs de Piñones
• 1 c/p de Ajonjolí (Semillas de Sésamo Tostado)
• 2 Bombones de Chocolate Blanco

• PARA LA TARTA DE TURRÓN CON NARANJA CONFITADA

• 1 Tableta de Turrón de Yema Quemada con Naranja
• 500 ml de Leche Semidesnatada
• 500 ml de Nata para cocinar
• 2 sobres de Cuajada
• 2 c/s de Azúcar
• 200 gr de Galletas María
• 50 gr de Mantequilla
• 1 Molde cuadrado desmontable
• 1 hoja de Papel Sulfurizado

Para la decoración

• 150 gr de Mermelada de Naranja Amarga
• 3 rodajas finas de Naranja Confitada
• 125 gr de Chocolate con Leche Extrafino, en onzas
•  50 gr de Pistachos
• 1 c/p de Ajonjolí ( Semillas de Sésamo Tostado)

• Las almendras de chocolate que he utilizado para la decoración de la primera tarta, están elaboradas con almendras enteras tostadas y recubiertas con una fina capa de caramelo, un praliné de chocolate blanco y cacao negro en polvo.
• La naranja confitada que he utilizado para la decoración, es parte de la que traía el turrón por encima.

ELABORACIÓN

Para la base de ambas tartas

1. Cubrir la base del molde con el papel, cerrando el aro para que no se mueva.
2. Picar las galletas con la picadora, hasta conseguir una arena de textura fina y granulosa.
3. Añadir la mantequilla derretida. Mezclar con las galletas.
4. Extender la mezcla en la fondo del molde, presionando con la mano para que quede una capa uniforme y compacta. Reservar en el frigorífico.
5. Picar con la picadora el turrón.
6. Poner en una cacerola, la leche, reservando un vaso, la nata y el turrón picado. 
7. Batir con una varilla de repostero, y llevar al fuego. Cuando comience a estar templado, añadir los dos sobres de cuajada, previamente diluidos en la leche fría que teníamos reservada.
8. Cocinar a fuego lento, removiendo con suavidad, hasta que comience a espesar.
9. Verter la mezcla sobre la base de galletas, que teníamos en el frío.
10. Introducir en el frigorífico, cuando el relleno esté frío, para que cuaje.

Para la decoración y presentación

• Poner la mermelada en un cuenco y calentar ligeramente en el microondas, para que adquiera una consistencia fluida.
• Cubrir la superficie de la tarta con la mermelada, de manera homogénea.
• Disponer por encima, de manera ordenada y armoniosa los ingredientes elegidos para cada tarta:
• Para la primera: almendras, piñones, ajonjolí, bombones.
• Para la segunda: chocolate, pistachos, ajonjolí, naranja confitada.

• Reservar en el frío hasta el momento de servir. Quitar en ese instante, el aro del molde, saldrá con facilidad, traspasando con cuidado, la tarta al plato o bandeja donde queramos presentarla.