Bagel de Salmón con Guacamole

No he podido resistirme y vuelvo a enseñaros otro de mis magníficos Bocadillos Gourmet, es una de esas cosas que me hacen perder el sentío, cuando tengo estos preciosos bollitos delante de mis ojos, me volvería loca comprando todos los del expositor de la panadería, aunque me controlo y no lo hago, ¡menos mal! No me gusta congelar el pan y antes que tirarlos duros, me los tengo que comer; con el pan me pasa como al del chiste, cuando se encontró, mientras caminaba, un botón, y no tuvo más remedio que hacerse un traje, ¡Ja, ja, ja...! 

Si recordáis mi Bagel de Langostinos con Huevos Revueltos, os contaba que en mi pasión panadera no entra la opción de hacer pan yo misma, pero no por eso me privo de comer buen pan; donde vivo encuentro panes de calidad, en mi barrio hay una tahona que sigue amasando a la vieja usanza, hasta hace poco horneaban con leña. Pero estos Bagel, son una especialidad de pan más actual, al menos aquí en Sevilla, los compro en un almacén americano que seguro tiene la mercadotecnia dominada, porque todo está dispuesto de tal manera que se antoja, es el problema que tenemos quienes pertenecemos al Club #CVCQ, pero menos mal que no está cerca de casa, si no perdería el control comprándolo todo, y hablando de antojos, tienen una Tarta Red Velvet espectacular, desde que la descubrí no he vuelto a hacer mi Tarta Red Velvet Deliciosa y de paso trabajo que me quito, aunque tampoco compro una Red Velvet, cada vez que voy, ya quisiera yo, pero no puede una vivir solo de caprichos, ¡Ja, ja, ja...!

No penséis que soy caprichosa o perezosa, bueno caprichosa a ratos, lo soy como el que más, jajaja... pero tampoco es la pereza lo que me mueve, sino la extenuación, sé que hacer las cosas una misma tiene su encanto, pero mi escasez de tiempo me obliga a ser práctica, minimizando el que paso metida en la cocina, de otro modo, no me sería posible hacer todo lo que quiero, bueno, todo, todo, tampoco, que quién mucho abarca, poco aprieta, según lo cansada que me encuentre al final del día, ese ratito solo para mí, es imprescindible, haciéndome sentir mejor.

Lo bueno de comer de bocata, que no digo que los comamos todos los días, pero de vez en cuando saltándonos la dieta, nos damos un buen homenaje, es que no son complicados de preparar, pero yo no me conformo con un simple y triste sándwich de jamón y queso, no, me gusta enredarme un poco, al final es que no tengo remedio, y acabo haciéndolos un poco más sustanciosos, que no se diga que no me lo curro, ¡Ja, ja, ja...! Estos los preparé al mediodía después de almorzar, porque quería hacer buenas fotos, la luz de mi cocina es ideal por la mañana, sin desplegar excesivamente el campo de trabajo y claro si deseo aprovechar esa luz natural, tengo que hacerlo antes del atardecer. Los dejé bien tapados en el frigorífico y a la hora de cenar estaban deliciosos.

La ventaja que ofrecen estos Bagel, es la de ser un pan con bastante consistencia, ideal si deseamos prepararlos con antelación, siempre que no pongamos ingredientes excesivamente húmedos, lo resiste todo, seleccionando los ingredientes y disponiéndolos de tal modo que el pan no quede mojado, quedarán perfectos. Algo que suelo hacer y funciona, aunque en el caso del bocadillo que os enseño hoy no lo hice, es poner sobre el pan una finísima capa de mantequilla, esto hace de barrera impermeabilizando relativamente el pan, y nos aguanta mucho mejor, sobre todo si lo guardamos una vez preparados en el frigorífico, ya que la mantequilla se endurece y crea una película perfecta, luego solo habrá que sacarlos una media hora antes de cenar para que se atemperen y a disfrutar comiendo.

Como supongo que os apetecerá probarlos, a continuación explico paso a paso cómo se hace. Comenzamos.

INGREDIENTES

• 2 Bagels o Panecillos redondos para bocadillos (1 por comensal)
• 160 gr de Salmón al Natural
• 4 c/p de Salsa de Eneldo o Mayonesa (al gusto)
• 100 gr de Guacamole 
• 4 Rabanitos Rojos
• 1 Tomate Maduro
• 4 lonchas de Pepinillo Agridulce
• Perejil fresco, Rúcula o Canónigos (al gusto)
• Eneldo
• Sal Rosa del Himalaya
• Pimienta Negra, recién molida

ELABORACIÓN

1. Cortar el pan por la mitad.
2. Extender una fina capa de salsa de eneldo o en su defecto un poco de mayonesa.
3. Escurrir y desmigar el salmón. Disponer encima de la salsa.
4. Cubrir con un poco de guacamole (en cantidad al gusto)
5. Espolvorear con eneldo.
6. Lavar y cortar en rodajas muy finas los rabanitos, disponerlos encima del guacamole.
7. Lavar, secar y cortar en rodajas finas el tomate, disponer tres en cada bagel.
8. Salpimentar.
9. Cubrir con las lonchas de pepinillo escurridas.
10. Cubrir con el perejil o rúcula, etc. (al gusto). 
11. Extender un poco de salsa de eneldo o (en su defecto) mayonesa, sobre el interior de la tapa del bagel.
12. Tapar y servir.