Pollo a la Florentina con Verdolaga y Portobello
Cuando cocino para mis invitados, me gusta sorprenderles con algo bien rico; la afición la heredé de mis padres, son los mejores anfitriones del mundo, cuando mi madre cocinaba era habitual recibir visitas en casa con frecuencia, su cocina se caracterizaba por ser clásica y tradicional, pero de vez en cuando nos agasajaba con alguna exquisitez novedosa y que yo, buena Gourmet desde pequeña, disfrutaba con entusiasmo, amaba la cocina y la buena mesa, y encontraba el placer en todo lo que mi madre preparaba con esmero.
Los sábados por la mañana era día de mercado, me encantaba acompañarla a la plaza de abastos para ayudarla a cargar las cestas; allí, mientras hacíamos cola esperando turno en los puestos, del pescado, la carne o las verduras, mi madre intercambiaba recetas con las vecinas del pueblo, escuchando con atención, tomaba notas mentalmente por si algún día, cuando fuera mayor, llegara a cocinar todas aquellas delicias que me hacían la boca agua; Y si me hubieran dicho que después de tantos años cocinando, siendo joven todavía pero con muchos guisos a mi espalda, que aún me faltan miles de platos por descubrir, no hubiera dado crédito.
Como Amantes de la Cocina sabréis, quienes compartís afición conmigo, que la cocina no tiene límites, cada plato sale diferente aún estando cocinado con los mismos ingredientes o por la misma persona, hay un sinfín de circunstancias ad hoc que hacen que cada vez que se cocine algo, obtengamos resultados distintos, pero con los que podremos disfrutar igualmente de una comida riquísima.
Cuando comencé a cocinar, mi inexperiencia me llevaba a cocinar sin despegar la vista de la receta a cada instante, tenía un atril (que aún conservo) en la mesa de mi cocina, donde ponía el libro abierto sujeto con pinzas para que no se cerrara la página, y lo miraba con tanta fijación, como si el mirarlo tantas veces fuera necesario para que saliera rico. Con el paso de los años, mi iPad ha sustituido a los libros, donde guardo mis libros y recetas favoritos, además de toda la Blogosfera, aunque no necesito mirar una receta para saber en que momento es mejor añadir la sal a un guiso, o a que temperatura debo poner el horno para que un asado salga perfecto, siempre viene bien para inspirarse, tomar ideas y sobre todo aprender mil cosas.
El plato que os enseño hoy, no ha salido de la red, sino de uno de los primeros que aprendí a cocinar por mi cuenta, y que de tanto repetirlo, casi lo podría hacer con los ojos cerrados. Pero mi naturaleza inquieta, sigue yendo por libre y me gusta hacer alguna que otra modificación, según lo que tenga en mi cocina. Estando hace unas semanas, sentada con mis padres al fresco de la mañana, después de desayunar, me dice mi padre: «Te tengo ahí reservado, debajo del naranjo "guachintón" (washington navel) una parva de verdolaga tiernecita, para que te hagas una tortillita para tu Club, que da gusto verlas»
Manojo de Verdolaga
Os podéis imaginar lo contenta que me puse cuando me llevó al huerto, todas las matas me parecían pocas, ¡Ja, ja, ja...! Pero contuve mi pasión desenfrenada, no quería llevármelas todas de una vez, porque recién cortadas están mucho más ricas, y solo me traje un manojo, con la intención de hacer la riquísima Tortilla de Verdolaga que mi Pilar me enseñó. Pero cuando llegué a casa y recordé que tenía unas pechugas de pollo para asarlas a la plancha, decidí hacer mi receta de Pollo a la Florentina cambiando las espinacas por verdolagas, y a la hora de comer teníamos este riquísimo plato en nuestra mesa.
Ya sabéis que la florentina, es un modo de cocinar carnes, pescados o huevos, donde la base se compone de una cama de espinacas, sobre la que se pone el ingrediente cocinado a la plancha o hervido, para terminar cubriéndolo con Salsa Bechamel o Salsa Mornay, pero no quería pasar la ocasión de probar con verdolaga, ya me conocéis, en cuanto pongo un pie en mi cocina, me lío, y salen cositas tan buenas como este plato cocinado a mi manera, con un acabado totalmente delicioso.
Y ahora, si os apetece, estáis invitados a ver cómo se hace. Comenzamos.
INGREDIENTES
- 400 gr de Pechuga de Pollo, cortada en filetes
- 450 gr de Verdolaga (op. Espinacas)
- 185 gr de Cebolla
- 325 gr de Setas Portobello
- 1/2 l de Salsa Bechamel
- Parmigiano Reggiano
- Aceite de Oliva Virgen Extra
- Sal y Pimienta
Para la Bechamel
- 1/2 l de Leche
- 15 gr de Mantequilla
- 15 gr de Aceite de Oliva Virgen Extra
- 30 gr de Harina fina
- Sal
- Nuez moscada recién rallada
ELABORACIÓN
- Deshojar la verdolaga, conservando los tallos tiernos; lavar con abundante agua y escurrir.
- Picar la cebolla y sofreír en un perol con un poco de aceite. Sazonar ligeramente.
- Añadir las hojas de verdolaga y saltear unos minutos hasta que merme y estén tiernas.
- Cubrir el fondo de una fuente de hornear con el salteado.
- En el mismo perol, saltear los Portobello, previamente limpios y laminados. Sazonar ligeramente.
- Cubrir la verdolaga con los Portobello salteados.
- Salpimentar los filetes de pollo.
- Asar el pollo a la plancha, a fuego fuerte para que se dore rápido y quede jugoso.
- Cubrir los Portobello con los filetes de pollo asados.
- Hacer la bechamel:
- Poner a fuego medio, la mantequilla y el aceite, en un cazo.
- Añadir la harina y remover para hacer un roux.
- Verter la leche poco a poco sin dejar de remover para que no haga grumos.
- Sazonar y añadir la nuez moscada recién rallada.
- Cocinar a fuego suave, removiendo continuamente unos minutos, para que la salsa quede fina y cremosa.
- Verter la bechamel por encima de la carne.
- Cubrir la superficie con abundante Parmigiano Reggiano recién rallado.
- Precalentar el horno 10' | 250 ºC
- Hornear 20' | 180 ºC
- Gratinar 3' | 250 ºC
- Como alternativa, si no tenemos tiempo y nos da igual que la superficie no quede dorada, se puede calentar directamente en el microondas, siempre que el recipiente sea apto para este fin, y servirlo tal cual, ya que todos los ingredientes están cocinados.
Buenos días de domingo:
ResponderEliminarYo creo que la afición de agasajar a nuestros invitados en la mesa, la hemos heredado muchos de nuestra madre, era su forma de darles la bienvenida, aunque la comida fuera sencilla, que no simple, como digo siempre. Al contrario que tú, la cocina no tuvo mucho interés para mi hasta hace unos pocos años, cuando descubrí que me gustaba trastear entre cacharros, que diría mi estupenda abuela, quizás estar rodeada de buenas cocineras me llevaba a ocuparme de otras cosas. Te puedes imaginar que cuando me casé tuve que empezar mis guisos receta en mano. Hoy me ha faltado tu vídeo, pero solo por el gusto de verlo porque explicas los pasos a seguir claramente, lo que indica que somos animales de costumbres y cuando nos cambian una, se tambalea nuestro orden mental.
Un placer siempre pasar por tu espacio. Besos. Ah y el pollo, buenísimo, que me pongo con la charla...
Buenos días Lola, siento lo del vídeo, no me ha dado tiempo a editarlo y eso que tengo algunos fragmentos grabados durante el proceso bastante interesantes, pero ya sabes en lo que ando y ni siquiera monté la mise en place, que ya sabes es casi el santo y seña de mis recetas, Jajajaja...
EliminarBueno a cuando lo edite, si lo hago, te aviso.
Yo he estado rodeada de buenísimas cocineras toda la vida, tengo recetas de todas aquí en el blog, las más tradicionales sobre todo, en algunas hago menciones y en otras no, ya sabes que no soy muy dada a dar datos, los imprescindibles y para de contar, aunque nadie lo diría dado la extensión de mis post, Jajajaja...
Besos y disfruta de un bonito domingo, por aquí casi otoñal.
Buenos días Concha!!
ResponderEliminarMenudo plato has preparado. La verdolaga nunca la he comido y creo que mi huerto esta a plan de ella, no lo se con certeza, aunque a mi me la parece, la que yo digo es invasora si la dejas ella Solita invade el huerto. Aquí como ya creo que te dije en alguna ocasión nunca se ha comido y me atrevo a decir que en ninguna casa y todos tenemos huerto, para nosotros si es la misma es mala por invadirlo todo jaja.
El caso es que este plato ha quedado maravilloso y me lo pones delante y lo comería encantada seguro. Bueno reina, te dejo, el rey de la casa esta de cumple y voy a la cocina que tengo tarea. Besitos y feliz día
Esther, así es, esta verdura, se ha considerado siempre una invasora, por tanto mala hierba, pero en mi casa aunque no hubo costumbre de comerla nunca, sí que lo conocía por una de nuestras vecinas de toda la vida, ella ponía sus potajes con verdolaga, borrajas o “alborrazas” como ella las llamaba, tagarninas (cardillos), incluso recuerdo un guiso con ortigas que subían los olores por el patio y daba gloria, pero ya te digo, nunca los comí, hasta que mi hermana Pilar se hizo vegetariana y las descubrió y en consecuencia yo también, ya que su cocina es tradicional pero adaptada a su dieta vegetariana.
EliminarBueno, te dejo tranquila dentro de lo que cabe para que disfrutes al máximo de tu pequeño, seguro está hecho un muñeco, para volverse locos con sus cosas, Jajajaja... Besos y feliz cumpleaños ❤️
Según leía tu entrada nos veía a mi madre y a mí muy reflejadas en lo que cuentas, pues aunque a mi madre la suya le había enseñado cocina tradicional, ella, como gran aficionada a los fogones y estupendísima cocinera, siempre andaba buscando recetas nuevas y diferentes que no sólo ofrecía a sus invitados, siempre encantados de probar su cocina, sino que introducía frecuentemente en el menú semanal. Si todo este mundo de internet le hubiera pillado en sus años mozos, habría disfrutado como una loca. Es ahora, que ya para ella sola cocina menos y sigue bastantes blogs de cocina y comprado revistas, no te digo más.
ResponderEliminarYo también iba con ella el sábado por la mañana al mercado de abastos. Siempre me gustó y me sigue gustando, de hecho, raro es que no vaya al mercado local de abastos de las localidades que visito en vacaciones, me gusta mucho ver los puestos de verduras y pescado, porque según qué zona, ofrecen productos que por la mía no hay, en los de carne hay menos diferencia, es casi más en los cortes que en los productos.
Bueno, que me enrollo. El pollo tiene una aspecto espectacular y la presentación, de diez. Según he leído el título de la entrada y he visto la primera foto, he salido a la huerta a ver si queda alguna verdolaga, que con este frío ya se van muriendo y sí, creo que me llegan para copiarte la receta, aunque a estas alturas ya no son muy tiernas.
Las que aquí crecen son invasoras, como las de Esher, pero a la vista parecen iguales, sólo que éstas no pican, saben más bien a lechuga, pero en crudo tienen un morder muy rico y crujiente.
Feliz domingo. Un beso.
Isabel, yo echo muchísimo de menos esos mercados de abastos, aquí son pocos los que quedan, y el más cercano me pilla lejos, por lo que si quiero ir, tengo que hacerlo en coche, así que me voy apañando con lo que tengo cerca, que son comercios de cercanía, que no están nada mal, y los supermercados que todos conocemos, que si bien te abastecen de todo lo necesario, lo que son productos naturales de huerto ni rastro, además de lo impersonal porque si hablas con algún empleado, es como si estuvieras en una ventanilla "arreglando papeles", jajaja..., y eso que ya sabes que por el sur la gente suele ser de carácter abierto, pero a veces te cruzas con algunos que pena da mirarlos, de lo agrios que son.
EliminarNosotros ya no tenemos verdolaga, estas aunque tienen un puntito picante, tampoco es una exageración, a veces se nota y otras son dulces, quizás sea por que son más tiernas, tengo que comprobarlo; mi padre tiene casi todo el huerto limpio para el descanso de invierno, ahora no le dejamos sembrar nada porque le da mucha tarea, y luego se resiente si sale los días fríos a faenar. Otra cosa que no he probado nunca, y que se me está ocurriendo ahora sobre la marcha, es a congelarlas, como las espinacas, una vez cocidas, quizás lo pruebe para la próxima cosecha, a ver que tal quedan.
Pero vamos, que siempre puedes hacer este plato con espinacas, que es como yo lo cocino siempre.
Besos, feliz domingo de otoño.
Excelente Concha y a mi me ha pasado mucho como bien cuentas en el que a mi madre preguntaban como hacer diferentes recetas ya que no es por presumir pero me enorgullece el haber tenido a una gran cocinera, primera profesora de cocina y como no quien va decir que su madre no sabia hacer cosas ricas en la cocina.
ResponderEliminarEn cuanto a este gran plato que nos traes es de autentica delicia la combinacion pollo verdolaga en el que es una de esas plantas que tengo en pendientes ya que no es la primera vez y siempre me he visto atraido por la verdolaga para utilizarla en alguna que otra receta, aparte de todas sus propiedades beneficiarias en cuanto a la salud ya que es diuretica, buenisima para el sistema cardiovascular y para la circulacion va de maravillas. Besos
¡Ay, nuestras madres! Jose Carlos, son para orgullecerse de ellas, más si cocinaban como los ángeles, porque sé de buena tinta que las hay que lo de cocinar no iba con ellas, tengo amigas que en su casa la comida era simplemente un modo de subsistir, lo de llevarlo a modo placer y disfrutar cocinando, les llegó con los años, o sencillamente porque no les quedó más remedio, jajaja...
EliminarAnímate a probar las verdolagas, ya verás que buenas están; por aquí quizás haya algunas todavía, teniendo en cuenta que son plantas de verano, pero se resisten con estas calores que han hecho en los últimos días.
Besos, pasa un feliz domingo.
Al igual que tú siempre me ha gustado estar entre fogones y absorber como una esponja toda la sabiduría culinaria de mi madre , con sus platos tradicionales, sus guisos, con los que disfrutamos de lo lindo ( hoy en día aún no consigo que me queden tan deliciosos como los de ella) , etc.
ResponderEliminarRecuerdo el primer libro de cocina que me regaló mi padre y me he visto identificada al leerte, no apartaba la vista de él , tenía que ser todo rigurosamente al pie de la letra y si no disponía de algún ingrediente, ya comenzaba el drama ja ja.
Quien me iba a decir a mi que tendría un blog donde enseñar mis recetas y que la creatividad se impondría sin miedo a experimentar, aún a riesgo de que no saliera bien.
Pero que me lío a hablar, vamos con tu receta que me parece extraordinaria aunque nunca he probado la verdolaga , pero solo con ver la fotografía se puede adivinar la ricura que has preparado y casi hasta olerla.
Es un placer inmenso poder agasajar a nuestros invitados , sobre todo ofreciéndoles lo mejor de nosotros mismos en cada plato .
Un abrazo Concha , que tengas un feliz domingo. Por aquí llueve a mares.
Bego lo de bloguear, más de uno ni siquiera sabía cómo se hacía, al menos a mí me pasó, yo aunque manejaba bien el ordenador y navegar por internet, lo de escribir un blog me sonaba muy lejano, ni siquiera me lo planteé nunca, sino hubiera sido porque mi hermana Pilar me dió el empujoncito, luego ya fui tomándole gusto, y ahora no podría dejarlo abandonado, son tantos años dedicándole horas y horas de trabajo, que casi me gusta tanto como cocinar.
EliminarSé que la verdolaga no es fácil de conseguir, y que muchos ni la conocen, sobre todo los que no han vivido de primera mano en el campo, por eso si te ha gustado el plato, te recomiendo que lo hagas con espinacas, que es como originalmente lo hago yo, en principio lo he publicado tal cual porque me parecía algo singular y extraordinario que debía dar a conocer para muchos de los que me siguen, al menos a mí es lo que me gusta encontrar en otras cocinas que visito, cosas de toda la vida, pero que por antiguas, son totalmente novedosas.
Besos, disfruta de esos días de lluvia, ¡Ojalá! Lloviera por aquí un poquito para sentir un otoño de los de antes.
Buenos días, Concha. Tu padre siempre te regala sorpresas en forma de hortalizas, verduras o frutas, pero lo mejor es su cariño. No he probado nunca la verdolaga y me gustaría seguro. Igual aquí se llama en valenciano de otra forma que yo no recuerdo.
ResponderEliminarTodo lo que lleva me gusta y en especial, la bechamel me va con cualquier cosa, si son setas, mucho más. Un buen plato de domingo.
Besos.
No sé si en valenciano se llaman de otro modo, Marisa, lo buscaré por la red a ver que encuentro, porque hay muchas páginas que hablan sobre esta planta que en el mundo de la cocina vegetariana y vegana se ha puesto muy de moda, ya te digo que yo la conocía desde pequeña, sin embargo no ha sido hasta hace pocos años que la comencé a comer, por mi hermana.
EliminarBesos y cuídate ese pie, el otro día leí tu "percance", espero que sea leve.
Ummm menuda delicia de plato. Probare
ResponderEliminarHola mi querida Concha!!! Qué ganas tenía de volver a tu cocina y embriagrarme del maravilloso olor que sale de ella. Me encanta!! Tengo que darme una vuelta por él y ver tus otras dos recetas detenidamente, no quiero perderme nada. Soy muy de pollo y si voy a una casa y los anfitriones me ponen esta maravilla de receta, no me echan de su casa ni con agua caliente je, je. Qué bien combinas todo, cada ingrediente está muy bien pensado para que salga una receta de escándalo. Y luego, nos regalas esos bonitos recuerdos que hacen que las recetas sean algo más. Cuánto me alegra visitarte de nuevo.
ResponderEliminarEspero que hayas pasado buen verano y que tú y los tuyos nos encontréis bien. Besitos.
¡Hola guapísima! Isabel cuánto echaba de menos tus comentarios, siempre es un placer charlar contigo, por cualquier medio.
EliminarTe adelanto que las dos recetas que he publicado durante tu ausencia, serán para ti como una de cal y otra de arena, Jajajaja..., a ver, me explico, la primera es una de pescado, que sé que te va a encantar porque es súper sana, además lleva guisantes que aunque también sé que te gustan más crudos, la verdad es que esta receta es impresionante de rica, y la segunda es la de la semana pasada, una Tortilla que hice con todo el cariño del mundo,, y sí, sé que no te gustan las berenjenas, pero creo Isabel, que si probaras algunos de mis platos cambiarías de opinión, porque a veces el modo de tratar los ingredientes, es fundamental para que algo guste o sea totalmente detestable, y te aseguro, que no solo es porque yo domino la berenjena hasta tal punto, que sé cuándo está en su momento perfecto para consumirla, o de lo contrario nunca me la jugaría, ahí es donde reside la diferencia, porque como no esté en buen estado, te cargas el plato. Y bueno, que como siempre, tienes la opción de no comerlo, claro está, Jajajaja..., o ín extremis, cambiarlo por calabacín.
Bueno no me dejo nada en el tintero, de lo personal ya te cuento por WhatsApp.
Besitos y bienvenida.
Si que te quedo rica , nunca he probado la verdolaga besitos
ResponderEliminarGracias Inma, pruébalo con espinacas, ya verás qué rico. Besos.
EliminarBuenas noches mi querida Concha como me identifico con todo lo que pones...en mi casa e incluso en la de mi abuela siempre estaba la mesa abarrota de comensales y
ResponderEliminarme recuerdo subida a un banco para ayudar y para ver como hacian 👩🍳 me gustaba ir a la compra sobre todo a los mercados...ahora que mi madre es mayor digamos que es en mi mesa donde nos reunimos para no perder esa hermosa tradición familiar que nos une gracias a la cocina y esos platos entrañables 😏no conozco esa verdura pero con espinacas seguro que si caerá 👍cuidaros mucho amiga besinos y buena semana
Fely, nosotros como vosotros, continuamos haciéndolo todo en familia, aunque lo más importante siempre lo hacemos en casa de mis padres y así podemos estar todos juntos. Lo importante son los momentos felices compartidos, y por supuesto una buena comida, no necesariamente debe ser a base de cosas caras, simplemente con que estén ricas y bien cocinadas ya es motivo de celebración.
EliminarBesitos, que tengas buena noche.
Hola mi dulce Concha!!!
ResponderEliminarQué bonito es leer los recuerdos del pasado.
Esos que no volverán pero que se quedan dentro de nosotros.
Otra planta de las tuyas que no conozco :) . No sé a que sabe, pero viendo este plato con todo su conjunto de ingredientes solo puede estar exquisito.
Y la presentación como siempre de 10 ;)
Besos
Pepi a veces peco de excesos, sobre todo de recuerdos, pero es que mi cocina es así, a diario surgen cosas que rememoran momentos felices de mi vida, y es que yo siempre he vivido rodeada de los que quiero alrededor de la cocina.
EliminarBesitos
¡Hola Concha! que recuerdos me trae también el ir con mi madre a comprar en el mercado los sábados... venir cargadas de bolsas, para toda la semana... Ahora todo eso ha cambiado mucho... sin contar la mala racha que vivimos ahora con el bichejo este... ya que se intenta ir, lo necesario... La verdad que se hecha de menos... aquellos tiempo.
ResponderEliminarEl pollo te ha quedado de lujo... nunca lo he hecho así... ni tampoco he probado las verdolaga... no me suenan para nada... (aunque con la cabeza que tengo últimamente... puede que la haya comido y ya no me acuerde...)
Pues como siempre querida amiga... un plato delicioso y un post entrañable... Un beso y feliz semana...
¡Ay Elisa, mi cielo! Eres un amor, Jajajaja..., gracias por el tour que has hecho por mi cocina, eso sí que tiene valor para mí, no se paga con dinero tener amigas que saben valorar lo que hay detrás de un blog.
EliminarLa verdolaga es una planta silvestre, quizás tus tíos aún tengan en el mato, aunque ya a estas alturas del año están agotadas, pero recuérdales que te guarden unas pocas, ya verás qué cosa más rica, mientras tanto hazte el pollo así pero con espinacas, y no te arrepentirás, queda riquísimo.
Besitos
Hola Concha, que recuerdos el ir a la compra con mi madre y ver cómo cocinaba ella, eso si me fijaba yo mucho para aprender de ella.
ResponderEliminarEs curioso pero sabes de donde vengo ahora, de coger unas verdolaga muy tiernas del huerto para esta noche hacer una tortilla, que coincidencia eh.
Nunca he probado esa receta pero te aseguro que me gusta si o si, seguro que toda una delicia como todo lo que haces.
Un besa,o
Ya Raquel, no veas cómo tenéis el huerto de verde, así estaba el de mi padre hasta hace unos días, por cierto tengo que preguntarle si me ha guardado algunas matas porque hoy ha estado limpiando y arrancando las matas de berenjenas.
EliminarBesos
Pues si hace unas semanas paso el arado y en pocos días se ha llenado de nuevo de verdolaga por eso me apeteció una tortilla y cogí ese ramillete, cuando veo la verdolaga siempre estas en mi cabeza jeje.
EliminarUn besazo
Claro Raquel, es que se han dado las condiciones idóneas, lluvia, Tierra recién arada y solecito.
EliminarBesos
Vaya manojo de verdolaga, cariño... qué envidia (de la sana me das...) disfrútala tú que no puedo, pues estoy muy lejos.
ResponderEliminarLa receta y tu entrada de hoy me ha encantado. Aunque yo era mucho más pequeña, también me acuerdo de los sábados de mercado con mamá en el puesto de Manolito.
Qué rica tu florentina... cámbiame el pollito por tofu... y ya me tienes ahí para que me agasajes... Besos preciosa, te quiero mucho.
Dalo por hecho, lástima que no sé si en invierno habrá alguna mata, creo que son de verano aunque aquí con las calores que hacen duran muchos meses.
EliminarYo también te quiero muchísimo ❤️
Hola Concha, me ha encantado la receta, no conocía la forma de cocinar a la Florentina, ni tampoco tengo posibilidad de conseguir verdolaga. Pero ya he apuntado espinacas y Portobello en la lista de la compra, aunque no sé cuando iré a comprar, porque justo ha ido mi marido esta tarde. Y en cuanto tenga los ingredientes voy a hacer la receta con huevos en vez de pollo, ya te contaré. Por cierto, me he enamorado de tu plato, no me estoy refiriendo a la receta, que también, sino a la vajilla, jaja. Feliz semana! Besos!
ResponderEliminarPilar con huevos y espinacas también está riquísimo, doy Fe de ello, porque lo he hecho.
EliminarEl plato es de anticuario, me lo regaló mi hermana Pilar, compró dos piezas únicas, uno lo tiene ella, y suelo utilizarlo siempre que cocino algo que le apasiona, aunque ya no come carne, este plato le encanta con tofu.
Besos
Hola, pues una vez más me traes a la memoria las historias que me contaba mi madre. Muchas veces en mis post he hablado de aquellos tios de mi madre con los que se crió que tenían un hierto conlas mejores frutas y verduras que ella dice que jamñas volvió a comer. Ella me hablaba de aquellas tortillas de verdolaga que hacía la tía Carmen y que eran una delcia. Es difícil encontralra en mercados y en fruterías de por aquí, al menos no las encuentro. Estoy segura que la combinación de esta receta de pollo es exquisita, diferente y original. Los mejores ingredientes y la buena mano en la cocina se han unido una vez más y el resultado es magnífico.
ResponderEliminarUn beso Concha!!
Elisa con gusto te regalo un manojo de verdolaga, ten por seguro que cuando vuelvan a crecer en el huerto de mi padre, te llamo y vienes a recogerlas, y así de paso charlamos un rato.
EliminarBesos
Buenos dias Concha, la combinación de ingredientes hace un plato estupendo y lleno de sabor, ideal para esta epoca del año y el resto de él. Sabores a tierra y aromas a otoño, un plato estupendo para el pollo que tantas alegrías nos da en la cocina.
ResponderEliminarUn beso, feliz dia.
Gracias Silvia, no soy de muchos ingredientes en el mismo plato, los justos para que se noten pero sin robar protagonismo a los demás, y en este, el equilibrio está conseguido, por lo que la satisfacción para mí es total.
EliminarBesos
Nunca he probado la verdolaga y tampoco la he visto nunca en el mercado, pero prometo fijarme a partir de ahora por si me la encuentro por ahí porque la receta pinta buenísima, de momento tendré que conformarme con las espinacas.
ResponderEliminarBesos.
Cristina, no sé si esta planta al ser silvestre y mal considerada mala hierba, la encontrarás en algún mercado, al menos aquí, incluso siendo autóctona, no la encuentras más que en los huertos.
EliminarBesos
Mi Concha bonita, por fin logro tener un rato de calma para visitar cocinas amigas, nada como venir sin prisas a disfrutar de estas anécdotas y remembranzas, me fui a ese mercado con tus palabras y te imaginé a ti a tu madre, a esa chiquilla poniendo atención a todo. Definitivamente a quienes nos gusta este bichito de la cocina, de esa buena mesa somos los más felices disfrutando del buen hacer de nuestras madres, abuelas, padres..., esa transmisión de saberes culinarios que pareciera en estas épocas no se valora tanto (lo digo por amigas de colegio contemporáneas a mí, a veces me siento como bicho raro, jajajajaja). Como sea, me encanta venir a tu cocina siempre, porque aprendo mucho, no tenía idea de aquello del preparado a la florentina. Las verdolagas no son comunes por acá, he visto que en la cocina mexicana sí son utilizadas. Tu padre guarda tesoros especiales siempre en su maravilloso huerto, has danzado en tu cocina con este pollo tan rico, me llevo el mejor sabor de boca, te mando un beso gigante mi querida Concha.
ResponderEliminarMi querida Natalia, yo creo, no, sé que llevo la cocina en los genes, de familia me viene, la buena mano, la afición al buen comer, y la cortesía con mis invitados, y como dices no todo el mundo es así, he vivido experiencias en casa de amigos, que mejor no contarlas porque vamos, ni a mi gata le pondría de comer lo que en alguna ocasión he tenido ante mis ojos, jajaja... Me quedo con mis experiencias, y si puedo elegir, prefiero ser yo quien cocine aunque seamos más de treinta comensales, no me da pereza hacerlo, si me garantiza que todo lo que se ponga en la mesa, será un triunfo y del gusto de todos, que entre otras cosas, a base de llevar tantos años haciéndolo, conozco el gusto de la mayoría de los que me visitan.
EliminarComo te conozco bien, seguro que adaptarás este plato a lo que tengas por allí, la base son las espinacas, y eso seguro que sí lo encuentras.
Besos
Hola Concha !como me alegra pasar por tu cocina y ver este plato tan estupendo el pollo en casa es la carne que mas preparo y esta receta no la he preparado y me ha gustado aunque yo la haré con espinacas , tiene una pinta muy rica ,la verdolaga alguna vez he encontrado pero solo algunas ramitas que yo quitaba considerandolas malas hiervas ,mi huerto es pequeño a si que no darían ni para una tortilla
ResponderEliminarBesitos
Bueno Mary, por pocas que sean,seguro te dan para una tortilla francesa, pero no te prives de probarlas, ya verás que cosa más rica.
EliminarBesos
Mi querida Concha, ya has leído en mi blog que voy de culo o lo siguiente, pero no me resisto a dejarte un comentario para decirte que esta receta me ha recordado mucho a mis abuelos, no porque hicieran un plato así, sino por la verdolaga, que mi abuelo era muy amante de ello y yo la miraba con terror ja ja ja Bendita inocencia de la más tierna infancia
ResponderEliminar¡Besos mil!
Ya imagino, yo sin ser tiquismiquis en el comer, nunca la probé hasta hace poquitos años, y ¡madre mía! Lo que me estuve perdiendo todos estos años.
EliminarBesos
Hola Concha, llego tarde al blog pero ya he saboreado en tus redes sociales este rico plato. Como te decía en alguna de ellas con tu post, además de ver un plato rico y delicioso, he aprendido lo que era esta tipo de verdura, no tenía ni idea de su existencia, me parece hasta bonita. Un fuerte abrazo querida Concha!!!!
ResponderEliminarMj, espero que todo vaya bien, y no tenga que preocuparme, bueno siempre me preocupa vuestra ausencia, excepto cuando conozco los motivos, si son por desconexión, placer o simplemente por estar ocupadas.
EliminarLa verdad es que sí, es una planta bonita, si no fuera porque es invasiva, y no tiene mucho rendimiento, sería una verdura ideal, más ahora que todo lo vegetal comestible está tan de moda.
Besos, disfruta un buen fin de semana, para todo lo demás ya sabes dónde me tienes.
Hola Concha.
ResponderEliminarLo que te he comentado anteriormente, que tengo tarea y de la buena, porque esta receta se ve rica rica y sabrosa.
Mi suegro coge del cortijo estas plantitas y otras y cuando ve algo que me puede valer ya me lo está trayendo.
A mí me pasa lo mismo que a ti, en mi casa mi madre, mi tía y abuela han sido de cocina tradicional y ahí estaba yo, aprendiendo lo que podía y ayudando cuando me era posible.
Desde siempre me ha gustado la cocina y siempre andaba pidiendo recetas, yo creo que de todo el pueblo tengo alguna receta, estuve muchísimos años trabajando en la radio de mi pueblo y tenía un programa de cocina, donde por teléfono recibíamos llamadas de todas las mujeres y de algunos hombres de la comarca, nos contaban con todo detalles sus platos favoritos o los que habían heredado y disfruté como nunca, hacía un trabajo que me encantaba y encima aprendía platos tradicionales , yo con mi libretilla y bolígrafo en mano anotando con todo detalle aquello que nos decían.
Pues eso, que con tanto recuerdo se me va el santo al cielo,
que tu plato es toda una delicia, con esa verdolaga y los champiñones, la bechamel que me encanta y me encanta, y el pollo hacen un plato de lo más completo, y de lo más rico.
Viva nuestra gastronomía, nuestra cocina, la de nuestras madres, abuelas y la nuestra que algún día nuestras familias dirán lo mismo... digo yo !!! jjjjj
y que bonito lo has presentado en ese plato.
Un besazooo enormeeeeee, para tí y tus padres, dales todos los achuchones que puedas, que yo a los míos los echo mucho de menos.
¡Ay! Puri, qué cosas más bonitas tendrás de recuerdo, esos programas de radio seguro te dieron muchas historias, me encanta la radio y ahora que no paro en todo el día, lo echo mucho de menos, antes oía más la radio, tenía tiempo y en mi cocina siempre estaba encendida, escuchando la Ser, o alguna de música, ahora con esto de andar todo el día para arriba y abajo, ni para oír música tengo la cabeza, que el cuidado de mis padres y la vida en general es muy complicada, y he tenido que dejarlo todo para dedicarme en cuerpo y alma al cuidado de mi familia. Sé, por amigas como tú, que hay que vivir el día a día y disfrutarlos al máximo, que una vez se van, es para siempre y luego no hay tiempo de arrepentimientos, las cosas hay que hacerlas ahora, darles todo el cariño del mundo, y cuidarlos, como ellos lo hicieron conmigo cuando yo era chica.
EliminarTienes suerte de tener un suegro tan generoso y con el que compartes buenos momentos, muchos no podemos decir lo mismo desgraciadamente.
Besitos y gracias por venir a reconfortarme con tus historias, que a mí me sientan como agua de mayo.