Revuelto de Tagarninas

Las Tagarninas, también llamadas Cardillos, es el nervio central de la hoja de una planta silvestre. Caracterizada por sus hojas espinosas, están cubiertas de una vellosidad en toda su superficie.

En realidad la parte comestible, es como decía anteriormente, el nervio central de dicha hoja. Para poderla consumir, es necesario sacar el nervio, quitando el resto de la hoja, que se desecha. Esto habrá de hacerse con extremado cuidado, ya que al tener tantas púas, puede producirnos cortes y pinchazos.

Yo las que he utilizado, son regalo de un conocido de mi hermana, que ha estado este fin de semana en el campo, y conociéndolas, me las ha regalado ya limpias.

Pero también las podéis encontrar ocasionalmente en algunos mercados tradicionales, incluso las he llegado a comprar en alguna que otra ocasión en supermercados.

En crudo su sabor es muy amargo y no se pueden comer, pero una vez cocinadas, se vuelven suaves y muy sabrosas. Tienen un sabor muy particular, aunque con matices parecidos a los espárragos trigueros.

. INGREDIENTES

• 1 kg de tagarninas limpias
• 1 Cebolla
• 2 Patatas
• 5 Huevos ecológicos
• Sal, AOVE

Imagen de Internet 

ELABORACIÓN

1. Lavar bien las tagarninas, y trocearlas en el caso de que estén enteras.
2. Poner abundante agua con un poco de sal a hervir, añadir las tagarninas cuando llegue a ebullición.
3. Cuando alcance el hervor de nuevo, cocer 1 minuto. 
4. Dejar en infusión, 5 minutos.
5. Escurrir bien.
6. Pelar las patatas, y cortarlas a láminas como para tortilla.
7. Freírlas en abundante aceite. Escurrir bien, una vez estén doradas.
8. Cortar una cebolla y sofreírla en un poco de aceite de oliva, cuando esté tierna y ligeramente dorada, añadir las tagarninas bien escurridas.
9. Saltear y añadir las patatas fritas. Sazonar.
10. Romper los huevos en un plato, y añadirlos al revuelto.
11. Remover y cuajar al gusto.